Aunque a día de hoy, el cloro sigue siendo el producto más utilizado para la desinfección de la piscina, la sal, cada vez más va cogiendo más peso en el mercado, debido a sus numerosos beneficios que aporta para nuestra salud.

Las piscinas de sal en Blanes funcionan, convirtiendo la sal en cloruro sódico, para conseguir desinfectar la piscina de una forma limpia para el medio ambiente, ya que no vertimos residuos y es buena para nuestra salud. El agua tiene el sabor de una lágrima, por lo que el agua no es salada y no es dañina.

La reposición de sal en la piscina es mínima, puesto que la sal, que se convierte en cloro, se transforma otra vez en sal, después del proceso de la electrólisis. Solo se pierde sal, con la evaporación por el sol y por cada vez que salimos de la piscina la sal que nos llevamos con nosotros. Lo que produce un coste de mantenimiento mucho menor que con las piscinas de cloro. Estas piscinas proporcionan hasta un 80% de ahorro, en mantenimiento y productos químicos.

 Son piscinas naturales, ya que no se echa ningún producto químico, no genera ni alergia, ni problemas oculares y el cabello no sufre con el agua salada.

Las piscinas de sal, al no tirar ningún producto químico, son piscinas más sostenibles, contribuyendo así a la ayuda con el medio ambiente.

La sal no es un producto abrasivo, por lo que nuestros trajes de baño no sufrirán desgaste por el cloro, como en piscinas convencionales. Nos ayuda en la circulación sanguínea y con nuestra capacidad respiratoria, ya que la sal ayuda en ello.

Asegura más diversión que las de cloro, pues flotas más y es más fácil moverse.

 Ayuda a mantener la piel rejuvenecida y ayuda a evitar arrugas en la piel. Puesto que la piscina de sal en Blanes, disminuye la presión osmótica, que tienen que soportar las células de la piel.

Ayuda a espantar abejas y avispas, el agua con sal son abrasivos para ellos, lo que hace que estos animales se acerquen menos por tu jardín. Otra razón es que la sal elimina la tensión superficial, evitando así que puedan apoyar sus patas en el agua.

Las piscinas de sal en Blanes funcionan añadiendo entre 5 a 6 gramos de sal por cada litro de agua. Cuando la sal ya a se ha disuelto en el agua, pasa el agua por los electrodos, convirtiendo así la sal en hipoclorito sódico, componente altamente desinfectante contra la formación de algas, hongos y bacterias.

 Si aún tenéis alguna duda sobre los beneficios de instalar una piscina de sal en Blanes, no dudes en contactar con nosotros, estaremos encantados de ayudarte a tomar la mejor decisión para tu piscina.